martes, 16 de noviembre de 2010

FAMILIA

Parece que todo este tiempo, el cual he estado a lomos de mi bicicleta, ha pasado de manera muy lenta. Si cierro los ojos aun me viene, como un suspiro, el viejo recuerdo de mi adiós en el aeropuerto de BCN. Parece que fue ayer y ya ha pasado unos días. El tiempo, el cual parece que se mide con escalas diferentes, se convierte en un elemento relativo. Por mi parte, casi ni me he dado cuenta y de aquí a poco comenzará un nuevo año. Parece que fue ayer, pero si giro la cabeza, creo que ha pasado un segundo. En cambio, si abro los ojos y miro el calendario, observo como el paso del tiempo ha expirado cinco meses de mi vida. Pero para mi madre, el tiempo, discurre en otra escala de valores diferentes a los míos. Según ella, en los días de mi aventura, parece ser,  que haya surgido una fuerza negativa en su cabeza. Dicha energía parece que tiene tenencia de alargar las noches y hacer que los meses se conviertan en un eslabón de segundos que tienen una estructura hacia el infinito. Parece extraño ver como dicho elemento tiene valores diferentes según las personas. Solo somos conscientes de su valor, cuando intentamos controlarlo. Tengo claro que el tiempo es imposible moldearlo y creo, que lo mejor es vivir sin tenerlo en cuenta para nada ya que somos cada uno de nosotros los que le otorgamos un valor relativo en función de nuestras necesidades. Toda esta parrafada viene a cuento porque me he reencontrado con mis padres y hermana, los cuales han viajado a las Américas a verme por unos días y a disfrutar de nuevas experiencias.

El viaje, creo que se les hizo un poco duro al principio, sobretodo por las distancias que había que recorrer con el coche. Una vez que se adaptaron, la cosa fue mas fácil aunque entiendo que acostumbrados a distancias relativamente cortas resulta un poco monótono y cansino circular durante varia horas entre deserticos paisajes. También observé que mi hermana esta acostumbrada a moverse por ambientes de los denominados “bien”. Ya se sabe que las señoritas de Barcelona están acostumbradas a otro ritmo de vida, aunque se adaptó a todo, sin ningún problema, excepto un día en que creo recordar, estábamos en tierra de Navajos. Todo se inició cuando teníamos que elegir un restaurante para ir a comer. Según la Sta Amalia, no quería entrar al lugar debido al tipo de gente que veía entrar en el restaurante. El lugar era endemico de los indios navajos. Para haceros una idea  de sus fisonimias, imaginaos un cruce entre gitanos, rumanos, chinos. La mezcla es explosiva y eso hizo que mi hermana, no se sintiera cómoda . Al no gustarle el lugar ni la gente, nos fuimos a dar una vuelta por los alrededores y resultó que todo estaba igual, la fauna del lugar era toda semejante. Así que decidimos entrar al restaurante inicial, el cual resultó, ser a posteriori, uno de los lugares donde comimos mejor. Moraleja : Ir siempre a comer a  los restaurantes donde van los lugareños, haga la pinta que haga. Por cierto hablando de restaurantes, vi que a mis padres no les gusta la comida japonesa. El sushi les parece una comida sosa. Aun recuerdo sus caras cuando tenían que comerse un cacho de arroz blanco con una loncha de pescado. Lo encontraban  insípido, ademas con los palillos se hacían un lío. Total vi que no era su estilo y no repetimos mas la comida asiatica.

Pero donde alucinaron de verdad fue en las Vegas. El cambio fue radical, pasaron de transitar por desiertos, tragar polvo, ver indios y chatarra a la opulencia de los HOTELES de la ciudad. La verdad es que fuimos a visitar los hoteles mas elegantes, ya que teníamos la referencia de lo que costaba hospedarse en cada uno de ellos. No me gustaría clasificar los establecimientos que visitamos ya que cada uno de ellos tiene un encanto especial, por lo que invito a que la gente vaya a visitar las Vegas y descubra por si mismos la magia del lugar. Quizás sea el contraste o la mezcla de todo, lo que lo hace único.
Como pueden cambiar los lugares, en tan poco tiempo. Eso es la percepción que tuve a mi regreso a Yosemite, al visitarlo por segunda vez con mis padres y hermana. Hacia escasamente unos veinte cinco días que había estado en el lugar. En el transcurso de este tiempo, el parque había sufrido una sorprendente metamorfosis. Sus picos estaban cubiertos por un manto blanco. Todos los saltos de agua,habían escupido el polvo del verano y estaban cubiertos por cortinas de agua que difuminaban el color grisáceo de las paredes. Pero lo mas espectacular fue observar las tonalidades de las especies que marcan el termómetro del tiempo. Colores ocres, marrones, rojizos, amarillos, cremas etc..., aparecían mezclados entre los verdes de las aciculas de las coníferas. Parecía como si un Velazquez, se hubiera dignado abandonar su lecho y hubiera cogido sus pinceles para darle un toque de color al paisaje del lugar. Aunque todo, se debía al ciclo de la naturaleza. Las especies caducas se preparaban para soportar las duras condiciones del invierno y poco a poco se iban despojando de su apreciado manto, tiñendo de color todo el paisaje. Recomiendo visitar el lugar cuando se produce este proceso, aunque circular por la carretera supone una tarea peligrosa. Encontramos nieve en algunas curvas donde nunca llegan los rayos del sol, debido a su orientación, por lo tanto, se ha de tener en cuenta la previsión climatología y llevar cadenas de nieve para evitarse sorpresas.

Durante todo este tiempo que he estado con la familia, parece como si todo fuera mas despacio. Es como si estuviera en un periodo de letargo provocado quizás por la repetición de los lugares por los que pasábamos o quizás el calor que desprende el entorno familiar. Puede que los cuidados otorgados por la figura materna hayan tenido la culpa. La mare, intentaba darme en todo momento, como si hubiera retrocedido 39 años, el amor que se da en los primeros días de haber concebido un bebe . La mare siempre sera la mare, y la mía como la mayoría de la madres , es un ser especial. Parece ser, que para mi progenitora, sus hijos no evolucionamos en ciertos aspectos de la vida. Siempre estaremos flaquitos cuando resulta que estamos fibrados, siempre habremos de taparnos cuando hay una corriente de aire aunque resulte que tengamos calor, siempre haremos las cosas mal cuando estas no coinciden con sus ideas, inculcadas en épocas pasadas y así podríamos estar un buen rato explicando las cosas típicas de las madres. Ya sé, que se preocupa demasiado, no lo puede evitar y eso le provoca un estado de ansiedad que le ha llevado a tener que tomar pastillas para poder dormir desde el inicio de mi viaje. Desde aquí, decirle, aunque se que no conseguiré nada, que se tranquilice y que no se imagine peligros allá donde no los haya y que sea consciente que por nuestra parte intentaremos esquivar todos los problemas que en un futuro puedan surgir.
Una cosa es estar preocupada y otra es entrar en un estado de obsesión que no beneficia a nadie. Espero, que al haberme visto como me he adaptado este tiempo a las circunstancias, le ayude a tener otro concepto sobre el viaje emprendido. Le mando infinidad de besos desde aquí a la mare ...mua..mua... i no et preocupis tant.

miércoles, 27 de octubre de 2010

AHORA TOCA CONDUCIR

El fin de semana lo pasé descansando, no tenia ganas de moverme mucho, así que dediqué tiempo en hacer tareas informáticas y comer chocolate. Por cierto, por la noche vi un par de películas en la pantalla del portátil y la verdad me dejaron buen sabor de boca. Una vez pasado el weekend, comenzaba el lunes. Por la mañana me levanté pronto y me fui directamente a desayunar. Después llevé la bici junto las bolsas que no me iba a llevar con migo, hacia el almacén que habíamos alquilado. Parte de mis bolsas se quedaron  a buen recaudo, eso si , cerrado todo con un buen cerrojo. Me fui a la parada de bus y en un momento estaba en el aeropuerto. Todo fue como siempre, colas para chequear, colas para el control de billetes y pasaporte y colas para embarcar. El vuelo fue corto, pero me dio tiempo para pegar una cabezada. Al aterrizar en San Francisco, todo fue muy rápido, ya que sin darme cuenta estaba cogiendo el fly tren que me llevaba a la estación de la Bart, que hay en el mismo aeropuerto. De aquí cogí el tren que en diez paradas me dejaba en el centro de la ciudad. Fui directo al hostel, pero costó encontrarlo, ya que la entrada del establecimiento estaba por un callejón sin salida, lo que se conoce con el lenguaje coloquial , como una ratonera. Nada mas entrar, pregunto por si habían llegado el Roger y la Llum, pero resulta que me dicen que no. Algo había pasado, pues ya debían haber llegado cuatro horas antes. El recepcionista me pregunta si tengo su num de teléfono y entonces enciendo el mobil y recibo un mensaje de la Llum diciendo que habían llegado hacia poco en el aeropuerto, problemas aereoportuarios. Decido esperarles en la recepción, pero no tardo ni cinco minutos en verlos entrar por la puerta. Nos saludamos y me explicaron que había habido algún problema en el vuelo y que estaban rebentaditos. A la hora de coger la habitación , nos explicaron que teníamos que cambiar de edificio, ya que el complejo tenia tres buldings. La habitación era esquinera, eso significa que tenia buenas dimensiones y un baño propio, con una bañera de epoca de hierro colado que le daba un toque especial al  baño. En la recepción de este edificio había un joven catalán de Barcelona del cual  obtuvimos buena información de cosas relacionadas con la ciudad.
La Llum estaba hecha puré, así que la dejamos como la bella durmiente y nos fuimos con Roger a comer alguna cosa y pisar el nuevo terreno. Mas tarde fuimos hacer el planing de los días en que estaríamos juntos. Nos montamos una cuadricula y con el google maps a calcular kilómetros y distancias. La cosa se hizo complicada en el momento que llegamos a Gran Cañon ya que mis nuevos acompañantes tenían un vuelo intermedio para volar desde Bilings a New York. Para concretar, Bilings esta cerca del Parque Yelowston. Nos percatamos que era imposible recorrerlo todo debido a las grandes distancias asi que sacrificamos la visita al parque del oso Yogui.


SAN FRANCISCO

 Nos adentramos a  descubrir la ciudad de San Francisco. La urbe no es muy grande pero su orografia esta llena de empinadas cuestas. A los primeros pasos, el lugar me encanó.Tiene algo, duende. Sus calles con multitud de vaivenes y zonas peatonales hacían que te sintieras libre, sin que te vinieran  sensaciones de agobio debido al transito de personas o debido al exceso de trafico. Todo era muy pausado, como si etuvieras paseando por un parque. Por la mañana, visitamos  toda la zona mas concurrida  de la ciudad . Estábamos ubicados en el centro, así que fue fácil movernos y acceder a Chinatown, lugar donde pasamos la mañana. Una porción de China te envuelve sin darte cuenta. Multitud de establecimientos te transportan a otro continente. Siguiendo la calle principal vas percibiendo olores que desprenden infinidad de alimentos expuestos en multitud de compartimentos puestos en los mostradores que dan al exterior de las calles. Una marabunda de asiáticos y algun que otro occidental intercambiaban sus billetes por toda clase de alimentos. El sonido que percibimos es imposible de traducir ya que los comerciantes aun conservan su  lengua originaria. EL color rojo esta presente en toda la calle, pero de manera repentina desaparecen los comercios chinos y aparece un tricolor formado por los colores rojo, verde y blanco. El barrio oriental da paso a una cadena de restaurantes italianos. Eso indica que hemos entrado en la pequeña Italy. Paramos hacer un expreso y tomamos fuerzas para subir a la torre de telegramas. La pendiente era empinada pero el esfuerzo mereció la pena. Desde dicho lugar había vistas espectaculares a los dos puentes de la bahía. Fue la primera vez que  divisábamos  la famosa isla de Alcatraz, famosa por su prisión, la cual se gano su fama como un  lugar facil de entrar pero inespugnable a la hora de salir, execpto para Clint Eastwoot. Comimos en un chino del barrio y probamos la langosta. Como han cambiado las cosas. Hacia poco comía sándwich de Nutela y ahora resulta que paso a comer delicioso crustáceo. Después de la fabulosa comida nos dirigimos a comprar un saco de dormir para la Llum y una tienda de campaña para la pareja. Caminar agiliza la digestión , pero cuando nos acercábamos a la zona donde se ubicaba la tienda, comenzamos a ver un tipo de fauna rara.

Multitud de mendigos y gente de mal vivir estaban sobreviviendo en las aceras. La gente del barrio estaba estropeadisima. A cada esquina se agrupaban gente con arapos y con las caras marcadas como si hubiesen sobrevivido a varias vidas. Parece mentira pero una  finisima linea separa la zona comercial de la zona de supervivencia. Por la tarde regresamos al Hostel. Al parar y tumbarte, te das cuenta que  el cuerpo esta hecho puré. Creo que ha sido culpa del viento. El tiempo en la ciudad ha sido un calvario, hace frió en la sombra y en la solana el sol calienta como si fuera pleno agosto. Asi de contradictorio es el tienpo en SF. Esto cambia con el viento, porque cuando se decide aparecer, no se esta bien en ningún lugar que no sea a reparo, con un café calentito sostenido en  tus manos. Menos mal que se me ocurrió coger el wind stoped por la mañana. El Roche no cogió abrigo y sufrió las acometidas del aire durante toda la jornada. Por la noche hicimos la reserva del carro y el sitio donde dormiríamos al cabo de dos días . Después nos fuimos a cenar..El Roche escogió el sitio y nos metió en un restaurante Italiano. Al entrar, observamos como todo el mundo iba con traje y había un músico tocando el piano. Dábamos el cante, algunos de los comensales de las otras mesa nos miraban. Yo me partía, le metía caña al Roger... Pero donde nos has metido ??????? nos la van a clavar...... Pero la verdad es que los platos no eran caros, lo que pasa es que en la carta había una sorpresa. Estaba escrito que se había de abonar un 20% por el servicio. Estuvimos haciendo broma todo el rato. Cuando llegan los platos, nos ponemos manos a la obra y la verdad, me decepcionó bastante la calidad de la comida. A la hora de pagar nos llega la cuenta y en bolígrafo habia escrito “servicio no incluido”. Que se piensan que no sabemos leer?. Depositamos lo que costaba la cuenta y dejamos unos 5 dolares de propina. Dicha cantidad era irrisoria, no se acercaba ni a una tercera parte del 20 % así que dejamos la pasta en la mesa y nos vamos del lugar con un poco de prisas. Después estuvimos comentando la jugada con ellos. Les pasó lo mismo que me pasó, cuando una vez en Canada una camarera nos recriminó al Chusma i a mi que era obligatorio dejar un porcentaje estimulado como propina.
Creo que en vez de propina se habría de decir tasa revolucionaria, pero a partir de ahora Llum i Roger son conscientes del tema. Al día siguiente teníamos el dilema si alquilar unas bicicletas o ir con bus a los lugares que íbamos a visitar. Las pendientes de la ciudad y el viento que soplaba fueron factores claves para decidirse a escoger el transporte publico. La verdad es que la red de autobuses nos fue bien, aunque a veces tenias que caminar un  rato para acabar de llegar al sitio. Nos fuimos directamente a ver el Golden Gate. Cogimos el autobús num 30 y nos dejó a una milla y media antes de llegar al lugar. Seguimos el camino de la costa que nos iba ofreciendo unas vistas esplendidas del puente. El día fue espectacular, no había ni una nube y eso facilitaba la cosa. Aun recuerdo el primer día que llegue a S. F, la niebla lo tapaba todo y estaba pendiente de encontrar a mi amigo Chusma. Tomamos algunas instantáneas y mas tarde nos fuimos a comer. Seguidamente tomamos el bus num 45 y fuimos a la zona financiera de la ciudad. Esta, estaba repleta de grandes edificios y de estos sobresalía uno que acababa en una especie de pirámide. Una vez visitada la zona, nos fuimos de tiendas. No compramos nada, pero comparamos los precios respecto a Cataluña. La verdad es que comprar en esta tierra sale mas barato debido al actual valor del cambio de moneda. Esperemos que el euro continúe fuerte respecto el $. Por la noche cenamos en el Hostel y la verdad es que no hay palabras. La base de patatas con ternera al estilo Stronagoff salió espectacular, un saludo desde aquí para las dos cocineras. Antes de ir a dormir, enchufamos el ordenador y sorpresa, la empresa inglesa de alquiler de coches me había enviado un mensaje en el que decía que la reserva podía quedar anulada ya que no se habían podido poner en contacto con migo.
Comenzamos bien, rápido me subió la mosca a la oreja. Vaya suerte la mía con lo de los alquileres de coches. Con que a esa hora no podíamos llamar a Inglaterra por el desfase horario, decidimos no hacer nada y presentarnos al día siguiente a buscar el vehículo. Debo agradecer el trato de Ivan o Ivy., ya que nos facilito la copia en papel de la reserva y me dio varios consejos muy interesantes. Al día siguiente, por la mañana tenia otro e-mail, confirmando que la reserva quedaba anulada. Vaya por dios. Nosotros no hicimos caso a la jugada y nos fuimos al aeropuerto a buscar el vehículo. Al llegar a la zona de alquiler, sorpresa en el mostrador de la empresa Dollar, había una lista con los nombres de las personas y las horas en que se entregaban los vehículos. Por supuesto, el nombre de Alejandro Santallusia, no aparecía en la lista, íbamos bien. Menos mal que no había casi cola, porque en los mostradores de Avis y Hertz había una marabunda de gente esperando su turno. Al llegar nuestro turno , entregamos nuestra reserva y el operario que nos atiende revisa su computadora. Por sus gestos intuimos que  algo pasa. De repente abandona su sitio y se va a preguntar a otro operario. Nosotros nos hacíamos los longis. El hombre llama al encargado y miran el ordenador. Me comunican que hay una reserva a mi nombre pero que esta anulada. Nosotros le comunicamos que por nuestra parte no hemos anulado nada y nos  dicen que debe ser un problema informático asi que en un plis plas nos agenciamos las llaves del coche. Nosotros que pensábamos que estaríamos liados toda la mañana por culpa de la anulación y la verdad es que todo fue rapidísimo. Instalamos el GPS en el carro y cuando  el aparato coge señal  nos indica el camino  para ir a San Jose.
Fuimos a Campbell, para que la Llum pudiera reencontrarse con su prima y su tía, las cuales hacia unos 20 años que no veia. Nos hospedamos en un motel y fuimos a comprar material deportivo para poder acampar. Despues Roger y Llum se fueron con la familia y yo me quede en el Hotel y para cenar, probé el embutido que mi madre les había entregado para que me lo hicieran llegar. Me prepare unas llescas de pan con tomate, regado con aceite de oliva y el jamón se convirtió en mi boca en un exclamo fundido de recuerdos que aparecían cada vez que ingería una loncha del preciado animal. Nunca tan pocos gramos de grasa hacían que mi cerebro se fundiera en saborear los matices de dicha comida. Mas tarde llegaron de la cena y nos fuimos a descansar.
El día siguiente nos fuimos dirección a Big Sur. Se me hizo raro, ya que parte de la ruta la había recorrido anteriormente en bicicleta. Me iba acordando de los lugares, por los que había pasado. Como cambian las cosas, un día de bicicleta equivale a una hora de coche. Nos fuimos hacia Piedras blancas, lugar donde vimos los leones marinos. Acampamos en el camping de San Simeon. Por cierto etoy un poco atontado, rectifico un poco no , lo estoy mucho. Resulta que a la hora de montar mi tienda, veo que falta una pieza, la capa impermeable, me la habia dejado en San Diego. A rezar para que no llovieva.



SEQUOIA PARK

Al día siguiente nos dirigimos hacia Sequoia Park, entre medio pasamos por una zona que se parecía a un desierto. Todo se veía de color amarillo, extensiones de pastos secos lo rodeaban todo, mirases donde mirases solo habia desolación. Parecía que todas las colinas estuvieran cubiertas de paja abandonada por el ganado e ignorada por los pastores. La carretera era bastante recta pero no se podía correr mas deprisa de 55 millas por hora. Llegamos a la entrada del parque, pero nos sorprendió el paisaje. Todo estaba muy seco, parecía imposible que en ese lugar  tuviera la condición de parque natural y mas aun pudiera  haber  en el los famosos arboles gigantes. Comenzamos a subir por la carretera y el asfalto comenzaba a inclinarse. A medida que subíamos desnivel, la vegetación comenzaba a simular algunos cambios. Comenzaron aparecer arboles y las fuertes encinas daban paso a los gigantescos cedros. Subíamos lentamente y en una parada, debido a la luz roja de un semáforo que indicaba obras en la vía, aparecieron de repente dos osos en la calzada. La verdad es que estaban demasiado lejos para observarlos bien, pero la sorpresa fue excitante. Seguimos remontando la carretera hasta ver las primeras columnas anaranjadas que nos abrian paso. Su tronco parecia que llegara al cielo.

Tenían un color anaranjado. Parecía imposible rodearlas, estaban quietas, tenían un porte elegante y su corteza parecía frágil. Eran seqüoias. El lugar mereció la pena, ya que en el norte no había visto ejemplares de tal magnitud. Fuimos a preguntar si había sitio en los campings pero en los primeros estaba todo lleno así que avanzamos y tuvimos suerte de encontrar sitio en un primitive campground. Por cierto antes de llegar al camping vimos un oso negro por el bosque. El animal era un individuo joven y se movía lentamente entre medio de los arbustos, en busca de comida. El encuentro no fue tan espectacular como el sucedido con el Grizzly de Alaska, debido al tamaño del animal. Pero este nuevo ejemplar  nos ignoró en todo momento. Parecía estar ajeno a nosotros. Se dedicaba por completo a la búsqueda de su alimento y por lo que vimos lo hacia de manera eficiente. La noche fue fría aunque había un cielo limpio, lleno de estrellas . Recogimos ramas del bosque y encendimos una fogata. La magia del fuego nos envolvió, quedando hipnotizados, hasta que el combustible se consumió. Por fin disfrutaba de un fuego. Tanto tiempo viajando y nunca antes había tenido la oportunidad de encender una hoguera y sentir como te envuelve su calor. Por la mañana hacia frío y los arboles no dejaban  entrar  la luz . El plumas calentaba nuestros cuerpos y decidimos abandonar el reino de las sombras. Fuimos a Cedar Grove a tomar un café.
 Desde aquí, queríamos ir a ver el Kings Cañón, pero un mujer de Canarias nos explicó que havia un incendio y que estaba todo lleno de humo. Fuimos a comprobarlo y resultó ser cierto. El paisaje estaba lleno de una cortina finísima de humo que impedía tener una buena visión del paisaje. Decidimos que no valía la pena continuar ya  que no podriamos disfrutar de las vistas. La decisión fue fácil, las sequoias nos dejaron un mensaje grabado en nuestro ADN, asi que  fuimos a tocarlas y acariciarlas . Esta vez nos introducimos en sus entrañas, ya que  algunas de ellas  alojaban en su interior una especie de cueva, en  que antiguamente los indios  las aprovechaban para cobijarse en su interior. No se, pero el lugar parecia  tener magia. Supongo que inconscientemente al verte envuelto por dichos individuos, te das cuenta que somos una forma insignificante de la evolución. Son supervivientes, de un pasado lleno de dificultades, por lo tanto quizas sean  mejores que nosotros  en el  complicado procesdo de la  adaptación. Después de intentar captar la energía del lugar nos dirigimos a Fresno. A medio camino, hartos de soportar el calor. Hicimos

una parada en una plantación agrícola de melocotoneros. Compramos diversos tipos de fruta que por cierto estaban excelentes. Sobretodo a mi gustó las uvas, eran delicatessen . Nos acomodamos en un Motel 6 con piscina, así que no tardamos en ponernos en remojo y quitarnos el polvo del camino. Para cenar, nos aconsejaron un restaurante chino. Estaba cerca, así que el coche ni tocarlo. El chino, algo fuera de lo normal, los platos parecían del país de Gulibert, en tamaño gigante. Nadamos en la abundancia pero supo mal desaprovechar tanta comida. La gente se suele llevar las sobras en pequeños containers de plástico, pero nosotros al carecer de nevera decidimos no quedárnoslo.



YOSEMITE

Aun no me queda claro como se pronuncia dicha palabra, ya que diferentes personas lo vocabilizaban  de maneras diferentes. El viaje desde Fresno, se  nos hizo  corto. En la entrada del parque tuvimos que pagar un impuesto revolucionario de 20 $ que te permite estar en el parque por un periodo de 7 días. El parque empieza con formaciones boscosas, las cuales van haciéndose cada vez mas tupidas. La carretera iba dando giros y nuestra vista estaba a la expectativa de poder contemplar el gran Capitán. Este nombre lo recibe una pared de Granito, que quizás sea, por los escaladores, la pared  mas famosa del mundopara racticar dicho deporte. La zona tiene multitud de vías de escalada con diferentes grados de dificultad que discurren por toda su superficie. Sin la ayuda de unos anteojos, se hacia difícil observar a los escaladores, ya que sus cuerpos se vuelven minúsculos al lado de los descomunales bloques de granito. El zoom de la cámara hacia lo imposible para poder enfocar y asi poder contemplar la gente adherida al mineral. Con dificultad pudimos ver gente escalando junto sus petates repletos del material necesario para progresar en la pared . Esta gente ha de estar bien preparada ya que ademas de llevar utensilios para poder asegurarse durante la ascensión, también tiene que acarrear víveres para alimentarse y diferentes utensilios para pernoctar ya que suelen estar suspendidos en la pared varios días hasta que consiguen coronar la cima.
El valle es un lugar espectacular, diferentes paredes envuelven las curvaturas del terreno, formando multitud de cascadas y barrancos. La mente se confunde con las magnitudes ya que no hay referencias que puedan ayudar a tu cerebro a interpretar las formas que te rodean.

Llegamos al pueblo de Yosemite y nos fuimos directos al centro de visitantes  hacer las gestiones para encontrar alojamiento. Las cosas pintaban mal, ya que no había sitio,en ningún camping. El sitio esta muy solicitado durante todo el año y es difícil encontrar un hueco. El Ranger que nos atendió, hizo una llamada para ver si había alguna vacante. Por suerte, nos envió al campo 4, ya que parecía que se habían anulado unas reservas. Fuimos al campamento y resultó ser el camping de los escalatas. El sitio estaba lleno de “tirillas” de todas las nacionalidades. Había hombres y mujeres, los cuales tenían unos cuerpos trabajados a base de horas de entrenamiento. Cuerpos con poca grasa. Maquinaria engranada que en pequeñas fracciones de segundos hacían que sus venas se hinchasen y sus músculos afloraran en la superficie epidermica, para poder sujetarse de minúsculos salientes que afloran de la roca. Plantamos las tiendas en la parcela que nos adjudicaron. El lugar estaba situado cerca de un bloque de piedra que se había desprendido de la pared. El lugar era acogedor, parecía que estuvieras en casa. Así es como me sentía, al estar rodeado de gente que tiene la misma afinidad hacia un deporte que yo también practico.Me identificaba con ellos, pero a otro nivel. Aqui, me recordé de viejos amigos con los que he compartido cordadas y que les encantaria subirse por dichas paredes. Otra vez será.
Nos fuimos a visitar el pueblo. El lugar estaba formado por varias cabañas, el super, la tienda, el restaurante y poco mas. Por la noche, encendimos un fuego y cocinamos carne de cerdo a la brasa. Lo regamos con un tinto. Conocimos a una chica de Ibiza que hacia tres años que estaba en EEUU, pero ella nos esquivó al principio. Por la mañana siguiente nos despertamos allá las 07:00 horas y después de desayunar y coger fuerzas cogimos el bus que nos llevó al inicio del treking que teníamos que realizar.

Teníamos que subir al Half Dome. El inicio era suave, pero pronto comenzaron a verse los escalones de granito que íbamos superando a medida que avanzábamos . El camino estaba encajonado entre dos paredes que dejaban circular en su parte central, un pequeño curso de agua. Aparecieron varias cascadas en el camino. Estos saltos de agua intentaban modelar el duro granito, que parecía no preocuparse por la altura en que el agua descendía abandonando el flujo del río. Por unos instantes el liquido parecía que quisiera volar. En el preciso instante en que parecía que las gotas habían aprendido a planear, estas se volvían a concentrar en un chorro de agua que iba cogiendo fuerza. A medida que iban descendiendo iban impactando contra los bloques de granito, los cuales parecian ignorar la fuerza del agua. A medida que íbamos ganando altura, la gente se iba quedando atrás. El paisaje se volvía mas interesante y una nueva valle se iba abriendo. Al superar diversos collados, se nos presentaba la visión del Half Dome. La ruta era larga, unos 14 km de distancia y un desnivel de 1400 metros. Llegamos a la antesala de la cumbre, momento en que el Roger y la Llum decidieron no culminar el pico debido al cansancio. Me encontraba bien, así que decidí subir y coronar la montaña. Fui subiendo y al cabo de poco rato el suelo se convirtió en un bloque de piedra. Desaparecieron las plantas y la pendiente se transformó en una perfecta pared. En el suelo había algunos escalones esculpidos a base de paciencia. Parecía que estuviera escalando un tercer grado hasta que en el ultimo collado, aparecía una pared  vertical de granito. En el suelo había clavadas unas clavijas de un metro y medio de altura, que mantenían izadas un par de sirgas de acero por los cuales la gente se apoyaba en ellas para poder avanzar. Eso facilitaba las cosas, pero no era tarea fácil. Lo mas seguro hubiera sido traer un boudier para poder auto asegurarse. No entiendo, como la gente no se hace daño subiendo allá arriba. Pude ver como gente octogenaria y niños de apenas siete años subían y bajaban por la empinada pared. Me acordaré toda mi vida de varias miradas que me cruce durante la ascensión. Sobretodo la mirada de una anciana y de un niño con los brazos agarrotados cogiéndose en el cable y apoyando su cuerpo en las varillas de metal.
Mientras subía, me detuve y me fijé en sus iris. Observé, como tenían la mirada perdida, vacilante, indicando que se estaban  apunto de entrar  en la antesala que precede al miedo. Estaban paralizados, con sus manos enganchadas en el acero. Su cabeza parecía llena de dudas. Me hubiera gustado poderlos ayudarlos , pero si me dejaba de una mano para ofrecersela a ellos podía tener un susto. Lo unico que pude darles fue animos y que fueran poco a poco, pas a paso. Mis zapatillas tenian la suela  lisa y algun que otro resbalon habia sufrido asi que fui prudentemente para evitar  llevarme algún que otra sorpresa. Llegué a la cima y las vistas eran impresionantes, pero hacia un sol de justicia y una especie de neblina provocada por la calor, enturbiaba la visión. La bajada se hizo larga, muy larga. Llegamos muertos de sed y llenos de polvo. La dureza del camino, pasó factura al Roger. Su cuerpo le invitaba a vomitar y su cara tenia mal aspecto. La dura jornada unido, a la deshidratación provocada por la escasez de liquido y la fuerza del sol, lo llevó a ese estado. Por la mañana, después de haberse hidratado se  recuperó, aunque todos teníamos las piernas cargadas de agujetas.

Al día siguiente dejamos el parque, subiendo por la vertiente norte. La carretera por la que ascendíamos nos iba mostrando, multitud de picos . En algunas de sus cumbres, había trazas blancas de hielo. Tuvimos que darle caña al Chervolet, para superar la altitud del puerto Al final coronamos los 3000 metros del Tioga Pass y comenzamos una larga bajada hasta Bigshop.




DEATH VALLEY


Al día siguiente teníamos ganas de encontrarnos con el desierto. Comenzamos con un paisaje desolador. Miraras donde miraras, todo el paisaje mostraba una montaña pobre, desnuda de cualquier manto. A la gente optimista el lugar le pareceria un lugar perfecto para reflexionar . Solo tierra y piedras, aunque de vez en cuando algún arbusto lograba  solo sobrevivir en alguna fondalada. Los kilómetros se hacían monótonos. De repente a lo lejos apercibimos algo de vida. Unas siluetas, aparecían dispersas de forma aleatoria. Eran una especie de árbol que tenia apariencia de cactus. Dichos arboles son apodados “Yosua Trees”, famosos por ser portada de un disco de U2. En esta tierra, la vida es puramente supervivencia, los seres que aquí habitan no tienen mas aspiraciones. Por eso el lugar recibe el nombre de Deaht valley “ el valle de la muerte”. Íbamos avanzando lentamente por el paisaje lunar. Después de sortear una zona de baches, la temperatura se incrementó y subió a un punto que se hacia insoportable. La calor del aire, nos hacia sudar, la ropa se nos pegaba a la piel que intentaba sudar todo lo posible para refrigerarse. La boca se quedaba seca, la lengua intentaba moverse por la caverna, pero las paredes de la cueva estaban secas.

Al cabo de varias horas aparecieron como un espejismo, una concentración de dunas. No se como explicarlo, pero cada vez que observo dunas, parece que estas tengan una especie de atracción sobre mi. La multitud de formas que adopta la arena hace que sus finos granos te hipnoticen. Esas sinuosidades que toma el frágil terreno parecen diseñadas por los mejores arquitectos, aunque su creador es el viento, que las moldea a su gusto. Subirte por una de sus crestas, es una acción gratificante. Nunca sabes si el lugar por el que has ascendido permanecerá inmobil o quizas  mañana sera diferente.
El desierto, lugar inhóspito. Parece un lugar sin vida aparente, aunque si uno aprende a mirar puede que se sorprenda ver como los seres que alli habitan han sabido aprender a adaptarse al medio que les rodea.
El paisaje es parecido al que hemos visto en la televisión, cuando un desconocido, llamado Amstrong piso por primera vez la luna. Infinidad de tierra cubierta de piedras dejando al descubierto el pobre suelo. El lugar te envuelve. Eres uno mas en la nada y un silencio se apodera del lugar haciéndote parte de el. Algunas veces el suelo da una tregua y da permiso algunas plantas para que sus raíces puedan trabajar y ser eficientes. Pero entonces,sorpresa, de repente no me lo puedo creer, se pone todo negro y zasss.... caen gotas de lluvia que se ponen a morder el polvo del desierto. Quien se lo podía imaginar, es de locos. Visitamos uno de los lugares mas secos del planeta y se pone a llover. A ver quien se cree esto cuando lo lea.
Estos lugares están llenos de contradicciones. Sino como puede entenderse que al lado del desierto haya unas pistas de esquí. Cuesta asimilarlo, pero la naturaleza marca sus normas y la altitud determina el lugar donde el transparente liquido se convertirá en una esponjosa cubierta.
Las distancias en estos lugares desoladores se hacen larguísimas. El paisaje repetitivo y la ausencia de nada, hace duro y monótono el transitar por aquí. Solo rompe el paisaje, la chatarra que deja la gente acumulada en sus parcelas y el paso de cazas F19 haciendo practicas de vuelo en medio de la nada. Aqui todo lo que no sirve y no puede aprovecharse queda abandonado a la chatarra. Surgen parcelas en mitad de la nada con multitud de aparejos oxidados . La tierra en Death Valley no debe ser muy cara, a raíz de la multitud de letreros cercanos a la carretera, en los cuales se nos advierte que hay multitud de acres en venta.

Después de pasar unos días viendo secarrales, decidimos ir a la playa, concretamente a los Angeles y sus playas. Cosas del destino, hicieron la carretera por la que circulábamos se cerrara al trafico, cosa que complicó la jornada. Al llegar a los alrededores de L.A, la cosa se lió, comenzaron los atascos. Hartos de maniobrar en medio de ocho carriles, decidimos abandonar la ciudad y bajar por las playas del Sur de los Ángeles. La suerte nos daba la espalda, queríamos playa pero el tiempo nos deparaba una sorpresa. La lluvia y el frío, nos quitaron las ganas de desplegar las toallas. Nuestro mejor aliado era hacer unas paradas en los cafés de la costa que nos daban algo de calor. Al menos el tiempo dio una tregua y pudimos ir a ver las focas y leones marinos que habia en la Joya. Las focas no paraban de moverse en los acantilados, emitir sonidos y crear pequeñas riñas para mantener las posiciones de poder dentro del grupo. En cambio los leones marinos estaban en la orilla de la playa ajenos a todo, parecían perezosos, estaban inmobiles, como petrificados. Parecía que estuvieran haciendo una siesta de pijama y orinal.


PALMS SPRINGS

Después haber pasado un fin de semana con mal tiempo, nos dirigimos hacia Josua Tree. El olor peculiar del agua marina iba alejándose y aparecían nuevos paisajes que iban mezclándose. Íbamos ganando altura y coronado algunas colinas. El lugar cada vez se hacia mas hostil. Todo cambio sin darse uno cuenta. Volvían las piedras, pero esta vez los acompañaban unos seres llenos de espinas. Del suelo aparecían cactus de diferentes tamaños, formas y colores. Sus dimensiones eran considerables, algunos parecían que estuvieran toda la vida en el lugar, inmóviles observando todo lo que pasaba. No pudimos llegar al lugar establecido como destino que introducimos en el GPS debido al cansancio provocado por la conducción del vehículo. El día siguiente , llegamos a Josua Tree, eso si antes pasamos por una explanada llena de gigantes, parecidos aquellos, que el ilustre Don Quijote intentaba derribar, montado al galope de su Rocinate. Aunque estos no molían harina si no que movían generadores eléctricos. Pasamos por el pueblo, pero al final decidimos no quedarnos. La tarde, la pasamos en Palms Springs, lugar donde antiguamente los famosos de Holywood venían a pegarse unas fiestas locas. El lugar es bastante pijo, para estar en medio de un secarral. Es un sitio lleno de campos de golf. El lugar vive del recuerdo de Elvis, Sinatra y toda esa tropa que aprovechaban la solitud del lugar para pegarse algunas fiestas. Hoy en día, el lugar esta lleno de restaurante caros, tiendas caras, hoteles caros etc. Nos fuimos a buscar alojamiento fuera del centro y sorpresa el Motel 6 tenia jacuzzi al lado de la piscina. Pusimos nuestros cuerpos a remojo en las cálidas aguas de la charca para quitarnos todo el  polvo adherido en nuestros poros. La temperatura del agua era elevada, pero soportable. En   pocos instantes nos convertimos  en hombres rana.




FLAGSTAFF


Todo el día en el coche devorando gasolina. Recuerdo el paisaje moviéndose constantemente. Pasamos Phoenix y en el cruce, giro a la izquierda ya que a la señora del GPS no se le escapa ninguna. Así que redireccionando hacia el  norte hacia. Las suelas de los zapatos estaban felices pero nuestros huesos se quejaban. Llegamos de noche, lloviendo y crujidos por el tío de la vara. El lugar estaba repleto de Motels de todas las categorías. Mas tarde entendí porque. Resulta que el lugar se aprovecha de lo que antiguamente era la ruta 66. Dicha ruta, mitificada en las películas y conocida por los motars y aventureros, cruzaba la ciudad. En la actualidad dicha ruta ha desaparecido debido a la renovación del sistema de carreteras de EEUU, pero la gente la sigue recorriendo. El estado de Arizona para mantener el recuerdo, ha señalizado la antigua ruta con carteles con el antiguo indicativo. Al verlos parece como si la carretera te  hiciera un pulso y te retara a recorrerla.





MONUMENT VALLEY

Al día siguiente nos fuimos, directos hacia Toga, para entrar posteriormente al parque . La tierra era de color rojizo. También, cambiava la fisonomía de la gente. La raza india era la dominante. Muchos de los hombres llevaban el pelo con una larga coleta en su espalda. Su pelo era de apariencia finísima, con las caras de facciones redondas y ojos rasgados. Muchos de ellos vivían en caravanas aparcadas en mitad de la llanura. Supongo que quieren conservar esa libertad que les proporciona el remolque para continuar siendo nómadas si la ocasión lo requiere. Puede, también que construirse una casa, salga caro. Su tierra, es su vida aunque hoy en día la cosa ha cambiado. Han dejado de cabalgar sus potros, a conducir coches con caballos mecánicos para llevar a los turistas a ver el paisaje de sus antepasados. Su misión es intentar conservar el lugar, aunque lo veo difícil con tanta masificación.
Monument Valley , es un lugar que te transporta a tu infancia. Me recuerda las figuras de plástico con que jugaba de pequeño.Tenían la silueta del séptimo de caballería i la de los indios apache, los cuales siempre eran abatidos por los rifles de los blancos, perdiendo siempre la batalla. Ahora, estoy seguro que los indios ganarían siempre la batalla  por abultada diferencia. Ellos siempre han sido los buenos, aunque a veces nos los pinten como unos salvajes. Estan en su tierray viven en armonía con todo lo que les rodeaba.

Los peñascos y algunos cactus de la zona evocan en mi memoria las películas de John Wayne que vi en la gran  pantalla de mi  infancia. Esas formaciones rocosas, las cuales han aguantado el paso del tiempo, ha dado lugar al típico paisaje del western. Teníamos delante nuestro, tres formaciones que parecían catedrales de roca, esculpidas por el viento. Presentaban erosiones en formas de columnas, ideales, para que los antiguos navajos pudieran camuflarse de los azules uniformes . El color rojo de la roca y la tierra confería al lugar un aspecto de santuario. Acampamos en la tierra, esperando el amanecer. La noche fue nítida porque el viento nos estiraba la piel y barría todo lo que se ponía a su paso. Desde el repecho donde estábamos, nos pusimos a mirar el cielo. Las estrellas rompían la oscuridad y de vez en cuando algún objeto entraba en la atmósfera, dejando un haz de luz que duraba unos instantes. Debido al fuerte viento, hice vivac ya que no disponía de la segunda capa de mi tienda. Me puse a dormir encima de una mesa de madera, con la cabeza mirando al cielo y di las buenas noches, esperando con ansiedad que salieran los primeros rayos de luz. Por la noche el viento atizo el valle con duras rafagas aunque el saco me aisló de todos los factores externos. A las seis menos veinte aparecieron los primeros haces de luz. Pequeñas lineas aparecían en el horizonte, sin fuerza pero se intuía que el ciclo volvía a repetirse. La salida del sol fue de esas cosa que se te quedan grabadas para siempre en la cabeza. Los frágiles rayos de luz, se combinaban con la tierra rojiza del lugar. Tonalidades magenta y granates se mezclaban en el suelo y en el cielo. Parecía que el cielo se intentara verse reflejado en la tierra. Lo consiguió, por unos instantes, hasta que el sol tubo demasiada fuerza y rompió el hechizo navajo.

GRAN CAÑON
El gran cañon, es una formación dificil de hacerse la idea de toda su magnitud moviendose a ran de suelo, creo que es necesario sobrevolarlo para hacerte una leve idea de toda su envergadura. El desnivel, entre su parte mas alta y el rio colorado es aproximadamente de 1500 metros. El curso del rio, en el trancurso de los años ha escabado multitud de meandros, dando un aspecto ramificado al lugar. Multitud de colinas, se han ido formando quedando al descubierto las diferentes capas de minerales.  El color rojizo, junto a colores grisaceos predominan en el lugar dando un toque particular al conjunto. En la zona, encontramos multitud de ciervos, los cuales se movian por el parque ajenos a nuestra presencia. Los ejemplares eran grandes y iban agrupados en manadas de hembras. En el lugar habia carteles que nos indicaban la posible presencia de pumas. Aunque creo que si hay algun puma, seria imposible verlo, ya que la población de dicha especie esta en peligro de extinción debido a los humanos.  El parque esta muy bien organizado, ya que un conjunto de autobuses van recorriendo la carretera que va paralela al barranco y hace paradas en los puntos donde hay mejores vistas del lugar. Estabamos en la Sud Rip, o sea la vertiente sur, es la mas concurrida por la gente pero de camino hacia las Vegas queriamos ir a la vertiente Norte, para caminar por el mirador donde una pasarela de cristal te hace sentirte como un pajaro. Que sorpresa mas desagradable, el lugar estaba enfocado al turista. El camino habia sido un calvario, ya que la pista estaba en construccion y el polvo se colaba por todas partes. Teniamos que comprar un paquete de atraciones, para poder ir al mirador. Vaya negocio tienen montado. Tenias que perder todo el dia, ya que te hacian  pasar por un poblado indio, un supermercado indio una tienda de souvenirs indios....... ya sabeis todo eso. Por otra parte en el lugar no hay ningun sitio para comer o beber asi que tienes que ir a sus restaurantes. Se les ve el plumero.
 Decidimos irnos para las Vegas y asi ahorrarnos unos 100 dolares por cabeza y no perder medio dia sintiendote un poco idiota. A medio camino se encontraba la famosa presa hidroelectrica llamada Hoover. La verdad es que al vivir cerca de una zona donde hay multitud de centrales, el lugar no lleno las expectativas creadas. Las paredes de la presa estaban encastadas en la roca, curvandose hacia adrento en su parte central. El nivel del agua del pantano, era bastante bajo y dejaba al descubierto cuatro bloques de hormigon de grandes dimensiones.






LAS VEGAS

Lugar donde la noche se hace de día. Miles de bombillas se iluminan coordinándose en multitud de formas y colores. Todo parece quedarse pequeño, a cada paso un nuevo edificio va generando mayores expectativas que los anteriores. Parece que los edificios compitan entre ellos, para poder atraer con sus atracciones a gente indecisa. La arteria de la ciudad, esta repleta de casinos que están anexados a un hotel. Todo esta permitido, las cosas que en las otras ciudades estaban prohibidas aquí tienen cabida. El juego, alcohol, tabaco, sexo, drogas todo esta mezclado y cada cosa esta establecida siguiendo las normas de la ciudad. Multitud de gente intenta hacerle un pulso a la suerte en multitud de juegos. A veces en el intento, uno puede quedarse hipnotizado por la fantasía de las probabilidades y perderlo todo. Los hoteles están repletos de maquinas tragaperras ambientadas en multitud de temáticas. Esa luz, que desprenden intenta hipnotizarte y sus voces van llamándote constantemente, a cualquier momento. Una vez estas sentado delante de ellas, estas perdido. Comienza una batalla en la que tu ejercito de dolares, nunca podrá vencer el deseo momentáneo que provoca la avaricia de intentar ser afortunado por unos segundos. La maquina, inteligente ella, por haber sido programada por un experto cirujano de vaciar bolsillos, va dándote algún que otro premio, con el fin de creerte un tipo con suerte y aumentando tu sensación de avaricia con el fin de tenerte enganchado a su juego. Si sucede esto estas perdido, entras en una espiral de la cual es difícil escaparse.

Nunca he visto tantas maquinas tragaperras juntas, y tanta gente jugando en ellas y creo que nunca habrá un sitio como este, aunque lo intenten en los Monegros, nunca tendrá ese toque, único de Las Vegas.
Personalmente a veces me daba la impresión que la gente estaba enferma. Me daba pena ver a multitud de gente hipnotizada por un maquina artificial que se comunicaba con ellos mediante tres pequeñas ventanas cambiantes, buscando una simetría de colores y formas . No encuentro que satisfacción les puede da estar postrados delante de semejante artilugio. Que me expliquen la emoción.. que emoción!!!!
En cambio, los juegos como la ruleta, el poker, blackjack, eso es otra cosa. El jugador sabe con cierto margen, que probabilidades hay en el juego. Aquí el factor suerte, es muy importante. La emoción es mas fuerte porque eres conocedor de las reglas del juego y te lo has de currar. Aquí las posibilidades son un factor peligroso para corazones débiles. Tienes que ser un tipo calculador y saber que las matemáticas a corto plazo pueden ser favorables pero hay que resignarse ya que a largo plazo el otro lado de la mesa, es el que siempre gana.

Nos alojamos en el Stratosfere, quizás no resulta un hotel espectacular si evaluamos la decoración de los hoteles ubicados en el centro, pero tiene una torre que resulta ser el edificio mas alto de las Vegas. Las panorámicas desde la terraza son espectaculares. Por la noche uno puede observar la metamorfosis que sufre el desértico paisaje.
Las Vegas un lugar inclasificable, que todo el mundo quisiera tener cerca, para poder escaparse cuando el frágil cuerpo del ser humano sobrepasa un cierto nivel de presion y la cabeza empieza acercarse a la zona tintada de color rojo. Entonces es cuando esta ciudad se convierte en la perfecta válvula de escape de todas las preocupaciones.
Una cosa, que observe en la ciudad, es una especie de obsesión con el tercer ojo. Multitud de camaras escondidas en cualquier ubicación, controlan cualquier angulo inimaginable. Dia y noche estas siendo observado por un lente que capta tus movimientos, aunque nunca sea consciente de ese hecho. Incluso en la calle, el bus, no hay un metro cuadrado que no este enfocado por una semiesfera de color negro.





NEW YORK

Buscando nuevos paisajes, me encontré con la urbe por excelencia, New York,  aunque quizas mejor decir Manhattan. La ciudad cuenta con varios barrios como Harlem, Bronx, Queens, Brooklyn, Staten Island, pero todo el mundo asocia la imagen de New York al barrio o mejor dicho la isla de Manhattan.
Lo primero que vi de esta ciudad, fue la red del metro. Esta igual que cuando con 16 años vi una película de bandas callejeras, titulada los Warriors. Esa película me marcó. Quería ser uno de ellos . Lo que hubiera dado por poder ponerme el chaleco de cuero que identificaba a los miembros de la banda y poder liarla por las calles del Bronx. Las estaciones estan oscuras y solo resalta el alicatado de la pared por pequeños cuadrados blancos. Todo esta igual que cunado se construyó, pero mas deteriorado debido al paso del tiempo. El submundo de pasadizos, necesita una remodelacion, urgentemente. Difícil tarea ya que esta ciudad nunca duerme. El metro funciona las 24 horas.
Estuve cinco días en el barrio de Harlem. Antiguamente conocido como el barrio negro de la ciudad. Sigue estando plagado de gente de color, aunque sus habitantes negros, ahora hablan español y escuchan regeton. El idioma de la ciudad parece que se lo compitan dos lenguas, la originaria y la de sus inmigrantes latinos.
Lo que define mejor a esta ciudad es su skyline. Los edificios, parecen que quieran dominar el cielo. Hay una lucha entre ellos. Compiten por los preciados rayos de luz. Los mas grandes, coronan sus tejados con enormes antenas que parecen que intenten clavarse como agujas, al esqueleto que sostiene el cielo.
Por sus calles, transitan multitud de glóbulos amarillos con la misión de recorrer la máxima distancia en el menor tiempo. Aunque multitud de limusinas tratan de hacer giros imposibles, transportando gente vestida con glamurosoas etiquetas.

Dentro de la urbe hay multitud de calles que se agrupan en sectores donde parecen que estén al margen del ritmo de la ciudad. Las avenidas principales, son un flujo de personas moviéndose constantemente, parecido a la actividad que tienen las hormigas cuando llega la primavera. La gente parece que no tienen tiempo ni  para comer. La frase “ to go “ es la mas repetida en los puestos de comida. Muchos establecimientos no tienen mesas, ni sillas. Te coges la comida en unos recipientes de plástico y te vas. Aun asi, la gente hace colas para poder esperar su alimento . Donde se ha visto comer sin pan, sin vino pero sin mesa...!!!!
La  zona cero, da paso a la zona financiera, donde se encuetra la brujula que marca la dirección a seguir para todas las economias. Aquí, los banqueros miran el barómetro que marca las pantallas de Wall Street conscientes de su poder , aunque la gente que se mueve dentro de ella, aunque se crean importantes, son simples marionetas de un mercado controlado por un puñado de mentes que nos manipulan a su voluntad.
Intentaré ser realista, pero creo que esta sociedad esta predestinada al fracaso. No veo felicidad en sus caras. Viven para trabajar, intentan subsistir para llegar al siguiente mes. El que tiene mas suerte y tiene mas poder, se cree rico. Tonto el. Cree que comprando cosas materiales va a ser mas feliz. Esto es la sociedad del consumo. La crearon ellos y sus empresas, para incrementar beneficios y tenernos contentos. La gente que se lo creyó, ahora toman Prozac e intentan justificarse visitando  a psicólogos y psicoanalistas. No tienen casi vacaciones, una o dos semanas al año. Asi nunca  podrán desconectar totalmente del trabajo. Todo esta dispuesto para que no se cuestionen nada. No tienen con que compararse porque, necios ellos, se creen los amos del mundo. 

Ahora entiendo esas caras de sorpresa cuando les digo que estaré tres años sin trabajar. Se deben creer que soy rico o hijo de un jefe capitalista. La verdad es que siempre les explico lo mismo. Solo hace falta no estar maniatado por una hipoteca y no tener cargas ( tanto físicas, económicas, familiares o sentimentales). Ahh y lo mas importante, no tener miedo y tener la suficiente  valentía de dar el paso y lanzarse. Después miles de circunstancias decidirán el futuro.






LAS VEGAS

Un lugar donde
 la noche se hace dia
y el dia
nunca parece llegar

El tiempo
 no discurre por sus agujas
Un agujero negro
 alarga sus brazos
para deborar
 la fina arena

La suerte
intenta encontrar
un elegido
pero somos tantos
que se pierde
 entre los gestos

Las maquinas
sonorizan las salas
nunca descansan,
claro
estan programadas

Te van llamando
con sus voces
sin necesidad
de saber idiomas

Sus tonos
encandilan a la gente
como
 si fueran sirenas.

El alcohol
se derrocha
Bellas
muchachas
intentan complacerte

Rueda la bola
quedan
quietas las fichas
Columnas de colores
cambian de manos

Todo continua
gira la mesa
no hay descanso
y de repente la bola
se detiene
por el camino
aprendido
cerrando un ciclo.



NEW YORK


Sus entradas
se confunden
Estan sucias
 pero alicatadas

Me traen
recuerdos de joventud
forjados
por pantalla tricolor

Aquí se crean
 las nuevas reglas
que marcaran
el futuro

Paredes de cristal
intentan
 domar el cielo
Sus tridentes 
llaman
la atencion
del rayo

La sombra
se apodera de las calles
La luz
nunca rebota
hacia abajo

El cielo
posee un esqueleto
que se apoya
en sus tejados

Aparecen
geisers en el suelo
que
me atraviesan
los pies

Corre
 el submundo
 lleno
 de madrigueras

El banquero
mira el barometro
que marcan
las pantallas de
wall street
soñando ser adivino

Los globulos
amarillos
transportan
a vagos i ricos


Todo el mundo
esta hipnotizado
por minusculas
 pantallas
que brillan
en sus bolsillos

Parece que
solo
se comunican
mediante
metalicos mensajes

Mulatas
y negras
se hacen
las uñas

Mulatos
y negros
se estiran
la piel

miércoles, 18 de agosto de 2010

BY BY CANADA



ESTADO DE WASHINTONG
Tocaba volver a cargar las bicis con todas las maletas y comenzar a engranar las piernas. La salida de la ciudad fué, muy tranquila hasta que llegó un punto donde nos indicaba que las bicicletas no podían rodar. Tomamos una via alternativa que iba paralela a la 99, hasta que llegamos a un punto donde nos indicaba la nueva dirección a tomar. De repente llegamos a un punto muerto, donde encontramos una furgo con un remolque cargado con tres bicis. Preguntamos al conductor, si íbamos bien para los ferrys y nos dice que no se puede pasar y que carguemos las bicis en el remolque. Nos estrañamos un poco. Preguntamos cuanto cuesta y nos dice que es gratis. Que raro. Después nos enteramos que solo hay un túnel que pasa por debajo del mar y que solo la atraviesa la 99 y claro las bicis no tienen acceso. Una vez habíamos cruzado el obstáculo quedaban 14 kilómetros por la 17 hasta que llegamos a la zona de los ferrys. Cogimos el barco al vuelo y en un poco mas de una hora habíamos llegado a la Isla Victoria. Recorrimos los 30 kilómetros hasta llegar al puerto de la ciudad Victoria. Aquí tomamos otro ferry que nos llevaría a EEUU, concretamente a Port Angels. En Canadá el control de la frontera fue zis, zas, nos tocó un policía mexicano y el idioma facilitó las cosas. Ya veremos que encontramos en la otra banda. Oue alegria en tierra yanki, el control duro exactamente lo que dura hacer cuatro preguntas. Salimos del puerto y fuimos a un campgroun Rv a plantar la tienda. Cuando sacaba las alforjas me doy cuenta que un radio de la rueda trasera estaba roto. Seguro que habian sido los del ferry ya que ellos eran los encargados de  entrar y sacar las bicis de barco. Era demasiado oscuro para repararlo, asi que nos fuimos a cenar y por la mañana ya se me acumularia la faena. Nunca habia cambiado un radio, la verdad que al principio lo vi imposible,porque el radio no podia entrar recto en el buje, no habia sitio. Solución doblar el radio era la única opción y dío resultado. Al tensarlo, el mismo se enderezó y quedó recto, una cosa mas aprendida. Al desayunar nos dimos cuenta que los precios eran mas baratos. La verdad es que Canada es un pais que nos habia salido carisimo. A ver si bajamos la media un poquito aquí en USA.
Nos dirigimos por la 11 hasta Fork. La carretera entraba en un parque nacional y se notaba en el entorno. Encontramos un lago, que se parecia mas a un pantano. Sus alrededores estaban habitados por unos cedros gigantescos. Cada arbol debia cubicar unos 70 metros cúbicos y seguramente me quedo corto. En el lago la gente practicaba diferentes deportes, pesca, canoa, esqui acuatico ..etc
La calor pega fuerte por aquí. Tube que ponerme cremita de la güena varias veces y ponerme la gorra. En la cuneta de la carretera se podia ver bastantes cadaveres de serpientes, atropellados por los coches. Al llegar a sitio, sorpresa, no se permiten  tiendas, el encargado del camping nos dice que a pocos metros hay un motel, que a veces permiten acampar en la parte trasera, ya que tienen cesped. Vamos a probar suerte y resulta que encontramos una viejecita, muy amable que nos da permiso para poder acampar. Preguntamos el precio y nos dice que sale gratis. Queremos pagar pero no acepta. Pagamos 3 dolares por ducharnos, toalla, wifi o sea un lujo. El motel es de los de pelicula de Hichcoh, pero a nosotros nos va perfecto. Por la noche fuimos a cenar a un restaurante italiano y abusamos. Al dia siguiente la barriga estaba afectada. Nuestro estomago no se adapto a una sobrecarrega de comida, no estaba acostumbrado y teniamos una sensacion de vacio. Fuimos pedalando por la carretera y nos desviamos varias veces para ver cedros centenarios, los cuales estaban perfectamente indicados mediante carteles. La verdad es que eran grandiosos, pero claro eran solo un individuo. No me imagino como debe de ser un bosque de sequoias. Estos bosques tienen la peculiaridad de que estan cubiertos por una capa de musgo debido a la humedad que hay en ambiente, parecen bosques sacados de una pelicula de terror.De repente la temperatura baja en picado y aparece una neblina y en poco rato vemos como aparece a nuestra izquierda el Oceano Pacifico.

Esa neblilla iba calando, asi que toco abrigarse y ponerse el impermeable. Hicimos una parada para probar nuestra amiga nutela y tiramos millas. Al dejar la costa, aparece de repente el sol otra vez, asi que a desnudarse un poco. Al cabo de unas 30 millas llegamos a Quinault, y nos aposentamos en un camping estatal. La verdad no era nada del otro mundo. Llegamos cansados y con hambre la etapa habia sido larga unos 120 Km. Nos fuimos al pueblo y cenamos acompañados con unas rubias. Destacar que por la carretera se ve un trafico abundante de camiones cuya carga es maders de los bosques de cedros que hay en los alrededores. Estos vehiculos   desprenden un aroma finisimo procedente de la madera. Me recuerda al olor de las cajitas de madera de Marruecos.Al dia siguiente, hacia frio. El lago que habia delante del pueblo hacia brotar una niebla que te atravesaba los huesos. Costo arrancar, la humedad y el viento hacia que arrugara el rostro y las manos parecian bloques de piedra. Mis  dedos no respondian a mis ordenes y canviar de marcha era complicado. La etapa era larga y no sabiamos donde parariamos ya que no teniamos ninguna referencia. La etapa no tubo mucho que contar, salvo que aparecen olores nuevos. Cada vez que pasamos por algun pueblecito de la costa afloran olores de salitre. En esta zona hay gran cantidad de ostras y cangrejos. Aparecen multitud de industrias que se dedican a trabajar con ostras, ya que hay infinidad de cascaras amontonadas en los alrededores. Tambien los restaurantes nos indican que es una zona de marisco. Paramos a dormir a Gryland, nos ubicaron junto un señor mayor que habia cruzado Alaska y iba dirrecion sur por la 105, parecia que la vida lo habia castigado un poquito.
Al dia siguiente nos curramos 140 Km. La jornada se hizo larga, seguiamos la carretera de la costa y la larga distancia, seguida de las subidas, bajadas y la neblina hacia que costara avanzar.
A veces tambien se unia a esto un viento que hacia que la sudor se convirtiera de repente en hielo seco.
Estos contrastes hacian que nunca estuviese uno comodo. Por la playa de la costa a veces veiamos gente con rascletas que se dedicabana buscar esas esquiciteces que el  mar nos brinda. Llegamos por fin a Astoria, antes de entrar a la ciudad se ha de atravesar un puente que cruza el oceano. Este puente es grandioso, mas que el de San Francisco. A demas hace de linea divisoria de los condados. Lo curioso del puente es que posee dos zonas claramente delimitadas. En su banda norte tiene una zona construida mediante una estructura metalica con una estructura superior, seguidamente hay un kilometro construido sobre unas pilastras y antes de llegar a la ciudad el puente se empina mediante una estructura metalica y gana altura, para dejar pasar por su parte inferior buques de carga.

ESTADO DE OREGON

 Al llegar hacia mal tiempo. Estabamos frios asi que fuimos a comer. Se nos habia hecho tarde y no teniamos referencias de nada. Asi que fuimos a un motel a preguntar el precio y saber si habia algun sitio para acampar. Al final nos dijeron un par de sitios ya que el motel picaba. Tubimos que recorren unos 5 km hasta llegar al pueblo de warrengton  para  llegar a un camping. Llegamos, pero era tarde. La recepción estaba cerrada y habia un papel que indicaba que no habia sitio para tiendas. Vaya putada, decidimos ir a ver la zona de las tiendas, haber si alguien queria compartir parcela. Habia algunas parcelas libres, pero no sabiamos si estaban reservadas. Cuando estabamos indecisos de lo que teniamos que hacer, unos hombres de avanzada edad nos preguntaron de donde eramos. Una cosa llevo a la otra y al final nos ofrecieron la parcela donde estaban ellos. La verdad es que ellos tenian un bus ( una especie de megacarabana) y en la parcela exterior no tenian nada, asi que plantamos la tienda. Cuando nos ibamos a cenar nos fuimos a comunicarles que nos ibamos. Pero nos dijeron que nos llebavan a cenar a un restaurante. Asi que dejamos las bicis, nos montamos en su ranquera y nos fuimos a cenar. Eramos 9 cenando y estuvimos charlando y cenando, como en casa. La comida buenisima y nos salió barato. A la hora de pagar nos invitaron, todo un detalle. Se me olvidaba, el que nos invito a todo  era el capo, se llamaba Roy, estaba jubilado. Esta tropa eran pescadores y se juntaban para disfrutar del arte del anzuelo. Nos comentaron que esa tarde  habian pescado King salmon y Silver salmon, y que despues lo ponen al vacio y lo congelan, para consumir en un futuro.
Asi que bien cenaditos y con un par de cervezas dormimos como reyes. Por la mañana hicimos el vago, tocaba dia de descanso. Hacia mas de 5 dias que nos pegabamos unas buenas palizas. El camping estaba tranquilo. Toda la gente se habia levantado pronto para ir a pescar. Asi que nos fuimos camino a la ciudad de Astoria. Nos paramos a desayunar en un poligono anterior a la ciudad. Seguidamente nos fuimos a ver el puerto y el puente que comunicaba el estado de Oregon con el de Washington.

 La ciudad no tenia nada mas interesante asi que comimos y fuimos al Camping a limpiar ropa y cargar baterias de nuestros aparatejos. Mientras estaba por el camping se me acercó un hombre y me dijó si eramos bomberos. Parecia que los pescadores de ayer se lo habian comentado.El era tambien bombero de una ciudad ubicada al este y  estubimos hablando con el bastante rato hasta que le llamaron para cenar. Nos explicó que esto esta lleno de pescadores porque entre el 15 agosto y el 15 de setiembre es el momento en el cual los salmones remontan el rio para desovar. Claro, asi no me extraña que todo el mundo traiga salmones. En la entrada del camping habia una zona con varias mangeras para limpiar el pescado y varios mostradores para dejar los salmones, ademas habia dos ollas de acero inoxidable para cocer los cangrejos. Ahora entiendo la cantidad de remolques vacios que habia aparcados en un lateral de la instalacion. Eran remolques pertenecientes a las barcas de los pescadores. Nos fuimos a dormir y nos despertarnos con una boirina. Estaba todo empapado, nos costó arrancar. Nos dirigimos hacia la 101 direccion sur. La niebla o mejor dicho el chiri miri que hacia lo mojaba todo. Al cabo de un rato de rodar, ya nos sobraba casi todo. Yo iba pelando la cebolla, sacando capas. La costa del Pacifico nos iba enseñando algunos de sus paisajes mas bellos.  Concretamente en Cannon beach, vimos como en medio del oceano aparecian  varias formaciones rocosas que el agua va erosionando lentamente. Fuimos siguiendo la carretera de la costa hasta llegar a 5 millas antes de Tillamok. Paramos porque encontramos un camping del buen samaritano, o sea que, la calidad del establecimiento estaba asegurada. El dia habia comenzado con humedad y frio y acabó con aire helado. Me caia el moquillo.
A la mañana siguiente, hacia frescuni, asi que nos quedamos un poco mas tiempo metidos en el plumas. La calorcita que desprendía el saco te envolvía y hacia que soñara despierto. Después de desayunar, continuamos la ruta hasta Tillamok, donde nos desviamos por una carretera secundaria llamada Bayocean Rd. Esta carretera bordea la bahía y nos guiaba por el perfil de la costa. Pasamos por un faro y íbamos divisando paisajes de playa. Después vimos unas dunas, entre unos pinos, donde la gente conducía unos buguis, por las sinuosidades de las arenas. Llegamos a Oceanside, pueblecito donde hay una playa inmensa en que en uno de sus lados hay una duna gigante donde la gente se tira con unas tablas, para deslizarse por la arena. Comimos aquí y seguimos la ruta hasta encontrar de nuevo la 101. El trafico aumentó y al poco rato nos volvimos a desviar de ruta, para atravesar un pequeño puerto de montaña.

POR FIN UNA CAMA.

Llegamos a Lincoln city, pero decidimos continuar. Era tarde, pero íbamos otra vez al lado de la costa, seguro que seria fácil encontrar un camping. Continuamos rodando buscando un lugar para hacer campa, pero no vimos ninguno. Únicamente había sitio para Rv, no querían tiendas. Al final llegamos a Depoe bay, donde tuvimos que coger un motel, ya que no teníamos mas alternativas. El motel lo regentaba una familia indu, la recepción evocaba fragancias de la india, eso si las habitaciones eran grandes y muy espaciosas. Era la primera vez que teníamos una cama para cada uno, y lo mas importante había un baño , full equip, en la habitación.
Por la mañana siguiente vimos que era festivo, ya que por las calles de la población se llenaron de gentes disfrazados de piratas. Continuamos siguiendo el camino recorriendo los 110 kilómetros hasta llegar a Florence, donde fuimos a un camping del Estado. Aquí nos dimos cuenta que los camping estatales tienen un trato especial a los ciclistas. Nos establecimos en el área reservada a los ciclistas y el precio era irrisorio 5 $ por persona. Que tontos habíamos sido, en el estado de Oregon los camping del gobierno da un trato preferente a los mochileros y a los ciclistas. Lo único que se tenia que hacer era planificar las etapas para llegar al lugar adecuado. El día siguiente continuamos la ruta hasta llegar a North Bend, donde nos desviamos de la vía principal. Fuimos paralelos a la costa y aquí nos encontramos con unas dunas de arena. Estas estaban transitadas por multitud de gente que conducían quats y bugys. Era un no parar, la zona estaba delimitada, pero era inmensa. Había todo tipo de personas, desde niños hasta abuelos.

 Todos los vehículos llevaban una antena con un trozo de tela anaranjado, para que se les pudiera ver ya que el terreno era sinuoso. Nos equivocamos de camino mirando las dunas así que tuvimos que dar marcha atrás y remontar terreno.
 Después continuamos hasta llegar a Charleston, donde comimos y nos preparamos para un tramo largo y empinado. Al final resultó que había un fallo en el mapa y la etapa finalizo con 120 km, en un camping del estado de la población de Bandom, pero yo acabé un poco tocado. El tendón de aquiles de mi pierna mala me estuvo haciendo ver las estrellas los últimos 20 km. Toco hacer estiramientos y mismo me di un masaje. No veas el dolor que provoca cada vez que apretaba el tendón, parecía que afinara una guitarra. Ya veremos si la cosa da resultado y nos recuperamos.


EL TENDON

Por suerte me levante y la pierna no me dolía, al tocarme el tendón si que notaba algo de tensión y molestia, pero eso no me impedía ciclar. Creo que esto me lo provocó las perneras, ya que hacia dos dias seguidos que ciclaba toda la ruta con ellas puestas.Salimos rápido ya que no teníamos comida para desayunar. Comenzamos bordeando la costa y viendo algún faro y multitud de enormes acantilados.
Entraba el hambre, asi que estuvimos buscando restaurante pero solo encontrábamos locales donde servían marisco. Al final encontramos un mexicano. Nos tomamos unos huevos rancheros acompañados de arroz y frijoles. Retomamos la marcha con mas ganas, la ruta era larga. No sabíamos si llegaríamos a Brookings, había unos 140 km. Hicimos parada en Gold beach, lugar donde comimos.

En el restaurante, al irme a limpiar las manos descubrí que el sol me había dejado unas marcas en la cabeza. Por la mañana solo me puse el casco y debajo me olvide ponerme la gorra. Inmediatamente fui a buscar la gorra porque el día era bastante caluroso. La parte siguiente era dura, solo dejar el pueblo comenzaba una rampa empinada durante unas tres millas ( unos 5 km). Después de esta, se encadenaban varias subidas mas, menos empinadas pero igual de pesadas. Mientras paramos hacer unas fotos, vimos a un trío de ciclistas. Dos muchachas y un chico. Nosotros continuamos la ruta y en una subida había un coche parado. Del vehículo bajó un chico y nos ofreció pastas. Nos explicó que estaba esperando a sus compañeros, tres ciclistas. Comimos alguna pasta hasta que llegaron sus amigos. Hablando, el conductor se ofreció a ir a buscarnos birras y traérnoslas al camping. Pensad que el camping estaba a varias millas de la ciudad. Llegamos al camping y aquí la zona reservada para los ciclistas estaba bastante llena. Se notaba que era una zona de fin o de inicio de la ruta por la costa de Oregon. El limite con la estado de California quedaba a pocas millas. Mas tarde llegaron dos de los ciclistas. Resulta que el chico se llamaba Daniel, era artesano, bueno hacia collares y pulseras. La chica era alemana y al cabo de 20 minutos mas tarde llego la tercera, era una australiana. Daniel, hablaba español y nos contó que viajaba solo pero que hoy había encontrado estas dos muchachas y se juntó con ellas.

 Después vino el de las cervezas, era un poco moreno y hablaba algo de castellano. Por lo que parece no se conocían. Resulta que en un bar o restaurante se habían conocido la misma tarde. El tio era un poco pesado y por lo que nos contó Daniel, estaba viviendo desde hacia cuatro meses en el coche. Estuvimos bebiendo cervezas,escuchando historias y algun que otro consejo, todo esto bajo la presencia de full moon. Por cierto ya hemos pasado de los 4000 km.
Hoy tocaba descanso, por la mañana nos hemos levantado a las 09:00 horas y hemos hecho la colada. Después nos hemos ido a visitar el pueblo, aunque no ofrecía nada interesante. Así que nos hemos instalado en un cibercafé y venga cafés y zumos. La verdad es que el cuerpo lo ha agradecido. Sobretodo mi piel ya que ayer el astro rey me machaco con su luz. Me notaba la piel acartonada y al mirarme en el espejo del café he visto reflejado en mi cara esa brillantez en la piel que indica que se ha producido una sobreexposicion de fluido solar. Esta noche me tocará ponerme loción para hidratar mi epidermis. Cenamos en el pueblo y al regresar al camping hemos visto como había llegado un coreano que conocimos tres días antes. Estuvimos conversando y nos dejó ojear su libro. Era antiguo, de 1984, pero estaba descrito a la perfección toda la ruta de la costa Oeste. El Chusma tomó prestado el libro y se apuntó en el ordenador algunos datos interesantes. A este ritmo puede que en cinco días nos plantemos en San Francisco, aunque el camino como describe el mapa esta lleno de colinas, asi que costará lo suyo.


CALIFORNIQUEISON

Por fin hemos entrado en el famoso estado de California, por ahora todo sigue igual. Hemos visto gente haciendo surf. Incluso había quien tenia un remo en un brazo y estando de pie en equilibrio con la tabla iba moviéndose por todo el mar. Hoy hemos atravesado bosques de cedros que eran inmensos, mas grandes de los que vimos en el estado de Washintong, La etapa se nos ha hecho corta, habremos recorrido unos 100 km, pero hemos subido tres puertos. Por ahora hemos visto que los campground de California tratan a los ciclistas de manera preferente, así que habrá que aprovecharlo.
Segundo día en California, hoy hemos hecho récord. Unos 151 Km, con alguna rampa por en medio. Por la mañana, al no tener comida, nos hemos levantado pronto y hemos ido al pueblo de Orik, donde nos hemos dado el típico desayuno americano , a tope de colesterol. Pero a nosotros el tema no nos afecta demasiado porque después del pueblo venían unas cuantas rampas que se han fundido los huevos, las patatas y las salchichas en el segundo repechón. Un poco mas tarde tocó tirar de barritas energéticas. El día estaba nublado y cuando soplaba el viento te ponía los pelos de punta. Llegamos a Eureka, era un lugar grande. Nos aprovisionamos en el super y fuimos a comer. Seguidamente al ser pronto, rodamos unos 60 km mas hasta llegar a Redcrest.
El dia posterior nos levantamos un poco mas tarde ya que no hacia falta hacer las etapas tan largas. Era una jornada de plato pequeño, así que con la calma hicimos 80 km por los bosques de madera roja, o como los llaman aquí “ red wood”. La verdad que este tramo de carretera es muy bonito por la cantidad de enormes arboles que te encuentras ambos lados de la carretera. Nos quedamos a varias millas antes de Leggett ya que no había ningún lugar para aprovisionarse hasta unas 30 millas mas adelante. Que bien a las 16:00 horas estábamos en el camping, había sido un día de media jornada, aprovechamos para comprobar las bicis y perrear un poquito. En el camping, un poco mas tarde, llegó un hombre mayor. Era un ingles, que vivía en Laos dando clases de ingles y ayudando a los niños que habían tenido alguna mutilación debido a las bombas lanzadas por los americanos en la guerra del Vietnam. Se le entendía perfectamente y por esa razón estuvimos charlando generosamente de nuestros viajes y experiencias. Por la noche cayeron algunas gotas, pero el aire del lugar, secó sus huellas dejadas.
Nutela con pan 9 cereales, ya ha pasado a ser nuestro desayuno habitual, aunque ayer por la noche tuvimos unos extras: jamón, lo compramos en el super. Estaba, bueno que voy a contar, un manjar pero lo mejor fue el chorizo a la pimienta que nos zampamos , todo hecho made in USA.

Bien, por la mañana tocaba paliza, solo salir de Leggett, vienen unos puertos que te hacen sudar, eran bastante largos, hasta que llegamos al mar. Aquí, pasamos por varias poblaciones, hasta que llegamos a unas pocas millas antes de Little River. Unas 10 millas antes de llegar al camping he sufrido unos pinchazos en el tendón de aquiles de mi pierna buena. Primero aparecieron de forma discontinua y no muy intensas, pero en algunos repechos se mostraban intensos, incluso un par de veces tuve que parar la marcha. Creo que todo ha sido culpa de una mala hidratación, a partir de ahora me he de acostumbrar ha beber mas liquido, si no puede volver a pasarme. Para la cena compramos vino del bueno, aunque no teníamos ni vaso ni sacacorchos. Abrimos la botella gracias a la colaboración de unos vecinos, pero el vino toco beberlo a morro, rico....rico.
Por la mañana siguiente hacia frío y era domingo así que alargamos un poco mas el tiempo de permanencia en el saco. Al desayunar el Chusma tenia dolor de barriga y a mi el talón me enviaba de vez en cuando alguna señal. Al parecer lo del Chusma fue mal muscular, de sus abdominales y no debido al estomago. Comenzamos a rodar y la carretera num. 1 nos iba dirigiendo siguiendo el perfil de la costa. Era un subir y un bajar de manera continua , atravesamos pueblos cercanos a la costa, ya que siempre tenían acantilados entre ellos y el mar. Por el camino todo eran acantilados y formaciones rocosas deterioradas por el continuo movimiento de las olas. Paisajes bonitos, pero muchos de ellos inaccesibles, ya que o no había acceso o este era de carácter privado.

Llegamos a Anchor Bay, donde nos repostamos de víveres y comimos en la calle unos sándwich de chorizo con queso jalapeño y unos plátanos. Continuamos rodando y al final paramos unas millas antes de Fort Ross. A partir de ahora hemos de parar hacia las 18:00 horas porque el día se hace corto y entre montar la tienda y asearse si el camping dispone de duchas se tarda un rato y sin darte cuenta zassssss…..ya toca ponerse el frontal.
Al dia siguiente comenzamos a seguir las sinuosidades que nos mostraba el camino, un verdadero rompe piernas, subidas continuadas y largas. El día comenzaba fuerte. En una de esas playas por las que pasábamos, vimos un grupo de leones marinos aposentados en las arenas de la playa. Estaban inmobiles, tomaban el sol de manera sosegada. De vez en cuando alguno de los bichos marcaba el territorio, a base de un gesto o un gruñido. Aquí en la zona costera, vimos como aparecían numerosos carteles de bodegas donde invitaban al viajero hacer una cata de sus vinos. Llegamos a la bahia del vino y aquí estuve hablando con un alemán que me cortó el paso. Era un ciclista y estaba de descansando en la zona, se había cruzado EEUU desde la costa este hasta la costa oeste. Seguidamente continue la marcha, para alcanzar al Chusma. Yo con mi Ipod, me despiste y tomé la dirección equivocada. Me fui dirección Petaluma por una carretera secundaria. Aun no me lo explico ahora. Bueno de eso me di cuenta cuando reccorridas 25 millas llego a la poblacion y me extraña que mi compañero no se haya parado ni en el super ni en el primer restaurante, ya que era la hora de comer.

PERDIDOS.

 Continuo por el carril bici y aparece un desvio, ..pienso que raro que el Chusmi no este esperando!!!. Total decido coger el mapa y me doy cuenta que he recorrido 35 kilometros desviado de la ruta. No me lo podia creer, vaya fallo. Bueno no se podia arreglar, asi que envie un mensaje al mobil del compañero para decirle que mañana nos veriamos en el puente de San Francisco. Como en un restaurante y voy a coger la carretera 101, pero en la entrada habia un cartel que ponia: prohibido la entrada de bicicletas. OOOOOH MY GOD!!!!!. Pregunté a la gente y no había solución , tenia que dar media vuelta y conectar con la carretera de la costa. Otros 35 kilómetros para atrás. Intente llamar al mobil de Chusma pero no había manera. El viento venia de cara, se hacia duro, física y psicologicamente. De repente apareció la neblina, haciendo mas duro el viaje. Llegue a la intersección con  Tomales y aquí comencé a ciclar dirección sur para llegar algún lugar. Pero se hizo de noche y la niebla se volvía mas densa, asi que decidí parar y esconderme. Hice vivac, fue duro por la humedad porque en cinco minutos todo estaba chorreando. Miré mi teléfono pero no había cobertura, mi intención era levantarme temprano y intentar encontrar a mi compañero.
Por la mañana, la funda de vivak estaba chorreando, pero lo mas duro fue ver que un trozo de una rama se había incrustado en la bolsa frontal donde llevo las cámaras. Supongo que al apoyar la bici, la rama rompió el tejido. Tendré que poner un parche o un trozo de plástico, ya veremos. Fui rodando y parando en alguna tienda para comprar bebida y comida. Pasé por varias poblaciones, antes de llegar a una subida de 6 millas. Alguna rampa se las traía, tube que ponerme de pie en la bicicleta y hacer eses para poder vencer el desnivel. De repente llegué a  Sausalito, siguiendo los carteles que me iban indicando el camino para los ciclistas. El paseo marítimo de esta población  era muy bonito y estaba lleno de turistas.
 Había unas vistas preciosas pero estaban ofuscadas por la niebla. Se podían apreciar lo dos puentes de San francisco, el mas famoso, el golden Gate y el puente que cruza la bahía hasta Okland. Estube rato mirando a ver si encontraba al Chusma, pero eso parecia un hormiguero, estaba lleno de gente haciendo fotos y haciendo poses para salir bien en las instantaneas. Lo mas sorprendente fue cuando miré el mobil y no habia cobertura, no me lo podia creer. Hay cobertura en Alfarras y no en la zona norte de la Bahia de San Francisco. Cruzo el puente y otra vez sorpresa, sin cobertura. Como podia ser que en un pueblo situado a 40 millar mas al norte de la ciudad tubiera obertura 3G  y en la ciudad de SF, no tenia ni una raya. NO sabia que hacer, dudé un rato y decidí buscar la carretera de la playa e intentar encontrar un sitio donde hubiera wifi,para enviar un mensaje al Chusma. Al final tube que recorrer unas 15 millar por la via 35 hasta llegar a  Pacifica, aquí miré el correo y no ví ningún mensaje del compi. Le escribí diciendo donde estaba y intenté llamarle pero ahora su mobil no daba señal. Decidi recorrer 20 millas mas para llegar a Half Moon Bay, lugar de playa donde segun el mapa habia un camping para ciclistas.

 Monté la casita y estuve dando vueltas al coco si había hecho bien. Entonces pense que no podia nada, mis mensajes habían sido enviados, ahora solo tocaba esperar y ver si al dia siguiente tenia respuesta. Por la mañana sorpresa cuando me iba a la ciudad a conectarme a la red y a limpiar la ropa, los rangers me dicen que solo se permite a los bikers dormir una sola noche en el campground. Sorpresa ya me veía desmontandolo todo y buscando un motel, pero entonces apareció Esteven, un jubilado que por la mañana habia estado comentando con el mi viaje. Le pregunte si podía compartir su parcela y el y su mujer no pusieron ningún problema. Los dos eran jubilados, me dijeron que a ellos le salia  gratis. Tenían una caravana, de las grandes y antes de ir a la ciudad me invitaron a cenar. Quedamos a las 18:30, comenté si querían que comprara el vino, pero dijeron que nada de nada que ellos  tenían vino del estado de Washinton. Por mi perfecto. Al salir del camping, le comenté la situación al ranger y me dijo que me dejaba un día mas como mucho. Me fui a la ciudad y al conectarme a la  red conecte con el Chusma. Estaba en San Francisco y ya había pagado 3 noches de motel. Se quedó en la ciudad esperándome. Le explique lo sucedido y puede que hubiéramos coincidido en el puente. La multitud debió evitar, el vernos. Quedamos que el viernes nos veríamos en Half Moon Bay. Estuve buscando moteles asequibles por la zona, pero los que encontraba eran bastante caros. Al final cuando estaba limpiando la ropa, en las típicas lavanderías americanas, le pregunte a unos mexicanos si sabían un lugar bien de precio. Me indicaron un hotel en media de la calle principal. Me fui directo y el precio y la calidad del sitio me pareció excelente. Hice la reserva para el día siguiente y me fui a comer.  Me di una vuelta  conociendo la ciudad y sus playas y después regresé al camping.

Al llegar al sitio Estevan estaba fuera de la caravana. Venus, la mujer de Estevan me iba corrigiendo los fallos en la  pronunciación de mi  inglés. Estuvimos bebiendo vino tinto, mientras Estevan encendía la barbacoa de gas y  cocinaba el pescado y las verduras. El sol comenzó a debilitarse y la temperatura en el exterior comenzó a bajar. Entramos en la rulot y nos sentamos para cenar. Me sorprendió que tuvieran pan. Pero pan, pan del redondo de kilo. Estuvimos charlando y comiendo todo el tiempo. Los dos fueron muy amables con migo. Tocaba irse a dormir, así que nos dimos las buenas noches. Yo me fui a los lavabos a limpiar los queks. Por la mañana, desayuné en la caravana, con los dos jubilados. Café, jamón, pan, mermelada, fruta etc... y sin prisas.  Nos intercambiamos direcciones electrónicas y nos despedimos. Me fui directamente al hotel y me puse en contacto con Chusma, para quedar en la hora del reencuentro. Una vez quedamos, me fui a comer, tomar café y algunos helados. Me sorprendí al verme en el espejo de la habitación. Estaba bastante delgado.

Un comentario, ahora que estoy medio lucido, ...... puede haber gente que piense “ mira estos que vacaciones, como hacen el turista”, la verdad es que por ahora de turista o lo que se entiende como típicas vacaciones, nada de nada. La vida de ciclista es durisima. Se necesita gran capacidad de esfuerzo y sacrificio, aunque tranquilos ya llegaran otos tiempos y tendremos nuestros momentos para hacer el guiri.

REENCUENTRO

Al dia siguiente depues del breakfast, me fuí a la zona comercial de la ciudad, concretamente donde pasa la carretera 1. Me sente en el Mc Donals a tomarme un helado ya que tienen wifi y asi aprovecharia el tiempo de espera. Mientras estaba all, haciendo esas cosas y mirando por los cristales del local si llegaba el Chusma. De repente oigo que vibra la computadora, era el Chusma que me llamaba por el Skpy. Resulta que me estba esperando en el café que habia al lado. Nos reencontremos y nos explicamos lo que habia pasado. Decidimos tirar hasta Santa Cruz, paramos en varias calas a tomar alguna foto. En una de ellas habia percebes. Arranque varios de la roca y me los comi. Llegamos tarde a Santa Cruz y despues de aprovisionarnos, comenzaron los males de cabeza. Las bicicletas no podian circular por la 1, menos mal del GPS del Chusma que nos iba dando las referencias para poder llegar al camping de la población de Capitola. Llegamos casi de noche, un poco hartos, debido a la falta de carteles indicativos para llevarte al lugar.
Salimos, al día siguiente ante la duda de cual seria el camino a seguir. Nada mas intentar incorporarnos a la 1, aparecen carteles prohibiéndonos el paso. Damos media vuelta y cogemos una ruta paralela. Nos vamos desviando de la ruta y por casualidad cogemos la antigua carretera que va a Monterey. En un parque de bomberos, preguntamos para asegurarnos que vamos bien y nos confirman que vamos por buen camino. Avanzamos paralelo a la 1,y de repente aparece un olor de confitura de fresas. Se nos abren a nuestros ojos campos inmensos campos con fresales. Ademas también encontramos plantaciones de alcachofas, coles y lechugas. Eso si la gente que estaba en la recolección eran todos mexicanos. La ruta estaba muy mal indicada e íbamos preguntando para cerciorarnos que íbamos en buen camino.

Llegamos a Montery, cruzamos su puerto y paramos a comer. Hacían una fiesta griega y nos comimos unas costillas de cordero, todo un manjar para nuestro paladar. Miramos el mapa y nos dimos cuenta que ya podíamos pedalear si queríamos llegar a un camping. Nos quedaban unas 25 millas y no íbamos bien de tiempo. El tramo final se hizo largo. A demas de la distancia, que era larga, nos encontramos con un viento huracanado, tenias que cogerte bien de los cuernos del manillar si no querias irte directamente al suelo. , llegamos a Big Sur , pero casi no había luz. Las tiendas las montamos con ayuda de los frontales y cenamos en la oscuridad. Desde que abandonamos San Francisco,  parece que no se tiene en consideración a los ciclistas. La ruta no esta marcada y la distancia entre los campings es abusiva o incorrecta respecto nuestro free map..





ETAPA DURA,DURA,DURA.....

En teoría la etapa tenia que ser corta, pero no fue así. Salimos de Big sur y comenzaban las rampas. Era un arriba y abajo constante, parecían que las millas no pasaran. El paisaje inmejorable, pero estuvimos unas tres horas para hacer unas 20 millas. La carretera, al ser domingo ya os podéis imaginar, había trafico de weekend. Paramos en Lucia,la población era era una tienda y un restaurante, los cuales hacían el agosto, ya que todo el mundo hacia una breve parada. Nos hidratamos y ha recorrer 40 millas mas. La carretera volvía a convertirse en una montaña rusa. Mi frente parecía una cascada de gotas que se dirigían todas ellas a mi nariz, la cual hacia de trampolín, impactando la mayoría de ellas en el manillar de la bicicleta. Íbamos bordeando las entradas que el mar hacia en el paisaje hasta que de repente , harto de mover la manita del cambio, se observa a lo lejos una planicie. Paramos a comer en un poste de carretera y a partir de ahí la ruta se convierte en plana. En la costa vemos elefantes marinos, esta vez de cerca. Había bastantes y estaban en diferentes zonas. Al final llegamos al camping con luz de dí a, estaba atope de domingueros. Se nos planteo una cuestión, aquí la gente o tiene fiesta el lunes o no lo entiendo. El camping a tope y el lunes por la mañana la gente no tenia prisa por irse. Bueno cambiemos de tema. Por la mañana siguiente no teníamos desayuno a si que nos fuimos al pueblo a tomarnos un american breakfast.
Después de haber llenado el buche, salimos del pueblo (Cambria) por la 1 y que placer después de una subidita no muy intensa , encontramos buena carretera. Esto es otra cosa, ciclar en plano es distinto aunque casi siempre teníamos el aire en contra. Sin darnos cuenta llegamos a Cayucos, pueblo turístico por la cantidad de moteles que habia en su interior y por sus playas. Aquí sacamos dinero ya que no veáis lo caro que nos va a salir el viaje por el norte de América. A ver si lee esto un sponsor y nos patrocina. Nos desviamos de la carretera y fuimos al parque de los osos. Desde aquí nos dirigimos a San Luis Obispo y un poco mas adelante llegamos a nuestro destino, el camping de Ocean. Dato importante, aquí se acaba el buen rollo con los ciclistas, los campings de playa bien situados, incrementan el precio. Total 23 $, la parcela de hierba con derecho hacer uso de un grifo , unos lavabos y unas duchas. This is California. Lo bueno ha sido llegar a las 16:00 al sitio, esto te da tiempo a descansar y hacer tus cosas. Por cierto, ahora entiendo porque en el camping la gente no se iba, resulta que era un fin de semana largo “weekend holiday”, asi lo llaman por aquí.
Por la mañana siguiente hemos ido a desayunar en unos vagones acondicionados como restaurante de época. La decoración, la música, la comida todo estaba al estilo de los años 60. Las paredes del vagón estaban llenas de carteles de antiguas películas. Particularmente creo que no he visto ninguna de ellas ya que los títulos eran desconocidos para mi. Al bajarnos del vagón, vimos como paraba en el lugar otro ciclista. Nos saludamos, pero no entendía como podía conducir una bici de carretera y llevar colgado a la espalda un mochilon de 20 kilos. Comenzamos con una niebla pixanera, la carretera no empinaba mucho asi que avanzamos rápidamente. Esta vez la ruta estaba mejor indicada, paramos en Lompoc y aquí comimos en el super y después nos fuimos a tomar un café y a telefonear a la Sra Amalia (mama) para que estuviera tranquila. Nos tomamos nuestro tiempo ya que íbamos bien de hora y después continuamos unas 20 millas al sur hasta llegar al camping cuyo nombre era refugio. Estaba situado al lado del mar así que por la noche desde el interior de la tienda oiremos el compás de las olas cuando rompen el equilibrio que les imprime la corriente, a escasos metros de la orilla de la playa.

SOBREPASAMOS LOS 5000 KM

Por cierto ya hemos pasado de los 5000 kilómetros. A este ritmo, haré mas km en un año que cuando conducía mi volkswagen.
Hoy hemos llegado a Santa Barbara, lugar que mucha gente pude recordar de numerosas películas o series americanas. El lugar era bonito, tenia una playa grande, como la de Salou. Parece ser que aquí en USA, les parece bonito tener playas anchas con arena fina pero parece que desprecian un poco las preciosa calas aisladas del resto de la costa. Supongo que prima la comodidad, ya que muchas de estas calas tienen un difícil acceso, pero estar en esos lugares sin tener gente que pueda molestarte es todo un disfrute. Durante el día hemos tenido la alegría que la ruta estaba indicada con nuevos carteles y eso nos ha facilitado las cosas. Hemos recorrido 102 Km y hemos llegado a Ventura y hemos parado en el camping de la salida sur. El primero que hemos encontrado no nos ha convenido ya que por aquí abajo se ven muchos vagabundos. Estos suelen ir con bicicleta, a la cual tienen enganchado un bob. Para quien desconozca el vocabulario ciclista, un bob es una especie de carro que se acopla a la parte posterior de la bicicleta y en el cual puedes cargar infinidad de cosas. Los indigentes aprovechan el bob para colocar sus pertenencias o sus bolsas con latas de aluminio recogidas de todas partes porque parece ser que sacan alguna perrilla con la recogida del aluminio y el reciclaje de envases.
Otro dia mas ha pasado y por mi parte no controlo el día en que estamos, únicamente mi reloj me da alguna vez alguna pista del día en que estamos. El Chusma me va recordando que día es ya que el se va a San Francisco 5 días antes que yo, a recoger a su novia. Por esta causa no le doy importancia al día en que nos encontramos, aunque en un par de días habré de comprar el vuelo a San Francisco.





PLAYAS, SANTA MONICA, MALIBU.LOS ANGELES....


Hoy hemos batido un récord , nos hemos levantado a las 06:00 de la mañana ya que teníamos que llegar a los Ángeles y eso es complicado ya que la ciudad es inmensa. Para que os hagáis una idea su perfil de playa tiene unos 90 kilómetros. Por la mañana hemos pasado por las playas de Malibu, donde viven los famosos de la gran pantalla. La verdad que el sitio era bonito y muy tranquilo, pero no hemos visto a nadie. Después siguiendo la costa hemos atravesado las playas y sus urbanizaciones, repletas de pequeñas mansiones y espectaculares coches. Hasta llegar a los Angeles, aquí hemos seguido sus playas. En todas las playas que hemos ido pasando, no se veía mucha gente, únicamente `podíamos ver grupos de sufistas intentando domar las olas. Siguiendo las rutas de ciclistas hemos llegado a una calle llamada Venecia street. El sitio era variopinto, estaba lleno de tiendas y restaurantes, pero lo que le daba ese toque especial, era la multitud de gente inclasificable que se movía por ella.

Gente que se busca la vida, haciendo manualidades, vendiendo sus productos, etc. Incluso había un sitio donde vendían marihuana medicinal. Si, si había un lugar donde un doctor te visitaba y supongo que bajo su criterio profesional si creía que la hierba te podía ayudar te firmaría una receta especial.
Comimos en el puerto y fuimos a buscar el hostel, el cual estaba situado cerca del aeropuerto. Por cierto hemos visto la calle de Beberly hills, Beler, Sunset Boulevar. Entramos en un barrio latino-negro, parecía el Bronks. Las miradas iban todas a nosotros pero en ningún momento hubo ningún mal rollo. El hostel era un lujo, tenia piscina interior con un patio inmenso lleno de comodidades. Para nosotros ha sido todo un lujo y por eso estaremos un par de días, poniéndonos las pilas a recargar. Por la noche nos fuimos al pub de la lodge y venga cervezas, teníamos faena atrasada. Ahora ya tenemos la cosa hecha, el primer objetivo se había cumplido de sobras. Alaska de punta a punta, las roky mountains de Canadá y ahora estamos a unos dos días de San Diego y la frontera con México. Quien lo hubiera dicho, en un principio la ruta se acababa en San Francisco, pero parece que el cuerpo se ha portado bien y las lesiones nos han respetado.